Un descenso en la salinidad de las aguas en las rías gallegas y la aparición de una toxina han afectado a los bancos de marisqueo en diferentes zonas.

El consumo de pescados y mariscos sigue en descenso. Los hogares españoles sufrieron en 2022 una variación negativa del 8,5% respecto al año anterior. 

Pesca España ha lanzado su primera campaña promocionando el consumo de pescado y marisco fresco con el lema “Llévate pescado”.

El aumento de la temperatura del agua, el cambio climático y el descenso de la salinidad en las costas de Galicia afecta a diferentes especies.

Desde 2008 el consumo de productos de pesca es descendente. El sector cree que hay que tomar medidas debido a la preocupante situación.