Industria naval 4.0

02/11/2023

Marina mercante

Eva Novoa (*)
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La industria de la construcción naval lleva inmersa desde hace años en un proceso de transformación tecnológica a través de la innovación aplicada a los procesos de los astilleros y al desarrollo de nuevos tipos de buques innovadores diseñados y construidos para ser más sostenibles. Se suma así al esfuerzo que toda la industria debe cumplir para alcanzar el objetivo de la ONU de disminuir en 2030 un 45% las emisiones de CO2 respecto de los niveles de 2010, y alcanzar la neutralidad en 2050 para descarbonizar el planeta. Una meta que solo se puede conseguir a través de inversiones en proyectos conjuntos en I+D+i, tanto de astilleros como de las empresas auxiliares del sector.

Unas inversiones que no son precisamente baratas y para las que se ha necesitado y se necesita el apoyo de las Administraciones públicas si no se quiere comprometer la rentabilidad de las empresas. 
Son diversos los programas gestionados por diferentes administraciones y ministerios, aunque no todos adaptados a las características específicas de una industria naval en la que los astilleros son y desempeñan el papel de empresas tractoras.

EL PERTE NAVAL

Entre los últimos que se han puesto en marcha se encuentra el PERTE (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) del Ecosistema Naval, fruto de los fondos europeos Next Generation, que prevé en la primera convocatoria asignar 190 millones de euros de una inversión global entre todos los mecanismos existentes para el sector naval de 1.460 millones de euros.

Juan Pablo II, atunero construido en astilleros Murueta.
Juan Pablo II, atunero construido en astilleros Murueta.

El objetivo de esta primera convocatoria se centra en la transformación de la cadena de valor de la industria naval a través de su diversificación, digitalización y sostenibilidad, para conseguir autonomía industrial, diversidad de energías renovables marinas, mejora medioambiental y sostenibilidad en el transporte marítimo con el desarrollo de buques digitalizados con aplicaciones multidisciplinares y medioambientalmente respetuosas con el medio marino. Además, esta convocatoria ha exigido a las empresas el desarrollo de planes formativos en las disciplinas tecnológicas que se van a desarrollar para aumentar la capacitación de las plantillas, aunque lamentablemente estos planes no serán objeto de financiación, algo que sí se ha incluido en el PERTE del vehículo eléctrico. El pasado 14 de septiembre provisionalmente han aceptado dos proyectos asignando 57M€ de los 190 existentes.
Es una iniciativa para apoyar al sector industrial naval para que mantengamos la competitividad de España equiparable a la de nuestros competidores en Europa a medio y largo plazo. 

REVOLUCIONAR EL SECTOR 

Uno de los proyectos tractores que han presentado sus propuestas al conocido como PERTE Naval es Tecnaval 2025, que, liderado por SOERMAR y los clústeres autonómicos (ACLUNAGA, ASIME, Balearic Marine Cluster, Clúster MarCA y Foro Marítimo Vasco), agrupa a 26 empresas, la mayoría pymes, y diez comunidades autónomas, y plantea inversiones de 20 millones de euros (13 de ellos, subvenciones). Se trata de entidades muy diversas, tanto del sector naval como relacionadas con éste, que se han unido para integrar y transformar por completo la cadena de valor de esta industria través del desarrollo de proyectos de I+D colaborativos, estudios de viabilidad e inversiones en sostenibilidad.  

Un consorcio que, en definitiva, tiene la ambiciosa pretensión de revolucionar el sector naval tal y como se conoce hoy en día. Para lograrlo, siempre que cuente con el beneplácito de la Administración, trabajará para alcanzar la evolución tecnológica del sector aplicando la innovación tanto a los buques como a los procesos de los astilleros y de la industria auxiliar. Asimismo, buscará nuevos métodos para descarbonizarlo y cumplir con los objetivos medioambientales de la Agenda 2030 de Naciones Unidas e implementará innovadoras técnicas basadas en los principios fundamentales de la Industria 4.0. 

Esta propuesta inicialmente no ha sido estimada en la resolución provisional por lo que el consorcio ha presentado alegaciones, en el ámbito del proyecto tractor y los proyectos primarios, encontrándose a la espera de la resolución definitiva.

ENERGÍA RENOVABLE

Este proyecto tractor está integrado por 12 primarios, distribuidos entre los tres bloques establecidos por el PERTE. Cinco de ellos pertenecen al bloque de Diversificación, tres al de Digitalización y cuatro al de Sostenibilidad. 

Trabajos submarinos en el astillero Astican en el puerto de Las Palmas
Trabajos submarinos en el astillero Astican en el puerto de Las Palmas

Los adscritos al primer bloque abordan el diseño y desarrollo de procesos que permitirán innovar en la fabricación de prototipos para el aprovechamiento del viento como energía renovable marina (eólica offshore), cuyos aerogeneradores en España deben ser flotantes -mucho más complicados y caros de instalar que los fijos- debido a la gran profundidad de la plataforma continental en las costas españolas. Igualmente, afrontan el diseño y desarrollo de buques y sistemas de propulsión naval avanzados que emplean combustibles procedentes de fuentes renovables (electrificación a través del uso de fuentes de energía renovable verde) reduciendo a cero la huella medioambiental. También, la mejora y ampliación de funcionalidades del equipamiento que se usa en la explotación marítima.

ECONOMÍA CIRCULAR

Las propuestas pertenecientes al segundo bloque se centran en la búsqueda de nuevos métodos de organización de la producción a través de la aplicación al sector naval de tecnologías avanzadas y estándares propios de la fabricación seriada, así como en implementar la tecnología de la automatización y la robotización en los procesos actuales de soldadura a través de técnicas de seguimiento de movimientos y de la aplicación de la inteligencia artificial y de nuevas tecnologías que optimicen los procesos productivos en los astilleros.   

Pintura y acabado de un yate en Astilleros de Mallorca.
Pintura y acabado de un yate en Astilleros de Mallorca.

Otros proyectos primarios se adscriben al bloque de la Sostenibilidad. En este caso, su objetivo es buscar tecnologías innovadoras para reducir la huella e impacto ambiental del sector naval - como las de captura de CO2 para su implementación a bordo de buques-, nuevos ecodiseños basados en los principios de la economía circular para su aplicación a la navegación fluvial, desarrollos sostenibles basados en el uso de robótica para mejorar la eficiencia energética de la maquinaria pesada marina y la producción sostenible y libre de emisiones de recursos marinos a través de combinación de automatización, sensorización y principios Blue Economy. Concretamente, estos proyectos plantean el desarrollo de pilotos físicos, simuladores conceptuales, estudios de viabilidad o instalaciones de energías verdes, por ejemplo.

Con este planteamiento, el proyecto Tecnaval 2025 pretende aportar su granito de arena a la filosofía de los PERTE de hacer de España un referente internacional en capacidades industriales, que genere sinergias entre sectores punteros y empleo de calidad. Y hacerlo a través de la colaboración entre empresas de diferentes tamaños, con una importante presencia de pymes. La colaboración entre toda la cadena de valor del sector naval es fundamental para elevar el nivel tecnológico de las pequeñas empresas y que éstas puedan ser más sostenibles y sobrevivir en una economía tan competitiva como la actual.

IMPORTANTE RETO

Es indudable que el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio comunicará a los líderes de los proyectos presentados al PERTE Naval el apoyo que la Administración les va a brindar. Quizá cuando este artículo se publique ya se habrán comunicado, y será el momento en el que las empresas tendrán que valorar las condiciones económicas que este mecanismo les otorga para desarrollar los proyectos, analizando si pueden asumir esa responsabilidad y ejecutar todos los objetivos fijados al 30 de junio de 2025. No cabe la menor duda de que el desarrollo de los proyectos presentados al PERTE Naval supone la calendarización de hitos y objetivos tecnológicos fijados en los ámbitos de la diversificación, la digitalización y la sostenibilidad del sector que tardarían más en desarrollarse y su alcance sería más limitado de no contar con el efecto incentivador que supone este apoyo. Esta iniciativa supone un primer paso para analizar si este tipo de mecanismos es adecuado para apoyar a la industria del sector naval, si las condiciones exigidas a las empresas son asumibles por ellas y si permiten alcanzar los objetivos fijados. En definitiva, es importante saber si es útil para el tejido empresarial naval.

Presentar una propuesta al PERTE ha sido un reto importante para las empresas, especialmente para las pymes. En el caso del proyecto tractor Tecnaval 2025, la colaboración con los clústeres y SOERMAR ha sido un ejercicio de trabajo conjunto donde cada uno ha aportado su mejor saber hacer.

El PERTE ha sido un reto que el Ministerio ha lanzado al sector, pero el gran desafío está por venir. Será el desarrollo de todos los proyectos aprobados, la implementación de sus resultados y, por qué no decirlo, alcanzar los objetivos tecnológicos de diversificación, digitalización y sostenibilidad fijados para que el sector naval español esté, al menos, al mismo nivel que sus competidores europeos e internacionales. 

(*) Eva Novoa, 
Directora General de Soermar

Número 639 del mes de octubre

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