La Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca (ANMUPESCA) celebró los pasados 24 y 25 de octubre en la localidad marinera de Lastres (Asturias) su III Foro de encuentro y debate bajo el lema “Impulsando cambios, navegando derechos”. La cofradía de pescadores Santa María de Sábada recibió a las mujeres del mar que reivindicaron una presencia más activa en las instituciones.

La actividad pesquera no podría entenderse sin el papel desempeñado por las mujeres a lo largo del tiempo. Un rol, el de ellas, sobre el que ha caído el cuidado de la familia y el hogar mientras los maridos estaban en la mar, pero también el de reparar las redes para tenerlas listas cuando ellos partían en las mareas, las que les esperaban en puerto para vender el pescado a su regreso, las que limpiaban los peces y los maceraban en las fábricas de conservas…

Las mujeres del mar, como dice la actual presidenta de la asociación que las engloba (Anmupesca), Pilar Otero, son “bravas” pero no bravas en el sentido de peleonas (que sí lo son) sino en un significado que va más allá: el de valientes. 

Mujeres con coraje y fuerza que piden luz y voz, elementos esenciales para reivindicar un papel tradicionalmente ensombrecido y opaco en un sector muy masculinizado. Trabajadoras incansables que quieren estar presentes en los órganos de decisión y las instituciones, hacerse más visibles y que sus opiniones se tengan en cuenta en igualdad. 
 

​​​​​​Saben que la perspectiva de género tiene un valor, que son presente y también futuro, porque el futuro del mar, de la pesca y la actividad no puede prescindir de ellas. No quieren que las decisiones se tomen en un bar, como en el pasado, sino en las mesas de diálogo, sentadas con la Administración de tú a tú, porque son rederas, empacadoras, mariscadoras, patronas, armadoras, acuicultoras, pescaderas, biólogas y observadoras científicas.

El III Foro de las Mujeres del Mar puso estos temas sobre la mesa, en el debate con las ponentes, en las preguntas y demandas exigiendo mejores condiciones sociolaborales. Rosa Mª Pardo, de la Asociación de Redeiras de cerco de Portosí, decía “sin mejoras salariales y en las cotizaciones sociales, cómo podemos hablar de relevo generacional”. Por su parte, Angeles Cayuela, representante de Anmupesca en Andalucía, y Remedios Ruso, armadora y representante en la Comunidad Valenciana comentaban “he dejado a mi hermano al frente del barco y a tres mayores en casa, no vengo para salir en la foto sino para pedir nuestro lugar en los órganos de decisión, sin apuro ni verguenza”.

Temas como la conciliación, la equidad en los cuidados, la presencia en la gobernanza, la puesta en común de experiencias y soluciones a los problemas del día a día salieron a la luz en los debates y corrillos de este III Foro de ANMUPESCA en el que quedó claro que “unidas somos más fuertes”. Así lo recordaba Mª Teresa Costales, de la Asociación de Rederas de Bajura de Asturias, a la que homenajearon por sus 30 años de profesión, “no es lo mismo reivindicar o solicitar ayudas como colectivo que hacerlo como un particular”, decía.

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Lastres sirvió para profundizar también en cuestiones que preocupan al sector. La secretaria general de Pesca, Isabel Artime, subrayó la urgencia de impulsar el relevo generacional y reafirmó el compromiso del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) con políticas integradoras que promuevan la profesionalización, el emprendimiento femenino y la participación activa de las mujeres en espacios de decisión.
 

​​​Por su parte, Aurora de Blas, directora general de Ordenación Pesquera y Acuicultura, expuso el próximo marco financiero de la UE. Covadonga Jiménez, subdirectora general de Seguridad Social de los Trabajadores del Mar del Instituto Social de la Marina (ISM), recordó el antes y después en la protección sociolaboral del mar tras la aprobación de la Ley 47/2015, de 21 de octubre, que ha cumplido 10 años. Las asistentes dirigieron a ellas preguntas sobre ayudas y cotizaciones de autónomos.

El cambio climático y la sostenibilidad se debatieron en una mesa presidida por Rebeca Lago, gerente de Plataforma Tecnológica Española de la Pesca y la Acuicultura (PTEPA), con una visión científica desde la biología y la socioeconomía y la subdirectora general para el emprendimiento, la igualdad en la empresa y la negociación colectiva de mujeres del Instituto de las Mujeres (IMIO), Begoña Suárez, coordinó otra sobre gobernanza de las entidades dejando claro que “hay sitio para el liderazgo de las mujeres del mar”.

ENTREVISTA

PILAR OTERO, presidenta de ANMUPESCA



Pilar Otero es la nueva presidenta de ANMUPESCA, la Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca que agrupa a más de 15.000 socias representando a todos los eslabones de la cadena mar-industria. Con ella hablamos de los planes de futuro y de la lucha de las mujeres del mar por ser valoradas y reconocidas.

¿Qué objetivos persigue en su mandato? 
Nuestros objetivos son claros: fortalecer la asociación con nuevas entidades, lograr representatividad en todas las comunidades autónomas y posicionarnos como referente nacional e internacional en la visibilización del papel de la mujer en el sector.

Procede de la industria y su antecesora venía del marisqueo. ¿Habrá cambios? 
Antes de nada, quiero agradecer a la antigua directiva el compromiso que ha tenido a lo largo de estos años. Yo desempeñé el cargo de tesorera en el primer mandato, así que he tenido suerte al compartir el nacimiento de la asociación desde el principio. 

A lo largo de estos años, Anmupesca se ha centrado en la visibilización del sector primario, que tenía unas necesidades específicas: reconocer y  ampliar los coeficientes reductores en rederas y mariscadoras de a pie. Gracias a la lucha constante de la antigua directiva se alcanzaron los objetivos marcados. 
Ahora, queremos seguir la senda marcada, pero ampliar la lucha al sector transformador y comercializador, visibilizando así el papel que la mujer desempeña en toda la cadena mar-industria, desde la extracción hasta la comercialización, pasando por la transformación del producto y sin olvidar a rederas, biólogas, observadoras o científicas que hacen que el sector pesquero sea referente internacional.

¿Hemos avanzado en el reconocimiento social de las mujeres del mar?
Sí, clara y rotundamente. Anmupesca forma hoy parte de órganos consultivos autonómicos, nacionales e internacionales, y varios ministerios cuentan con nosotras para elaborar normativa, tanto transversal como específica del sector pesquero.

Aprovechamos para agradecer al Gobierno la invitación para participar en la reunión con el comisario de Pesca y Océanos, Costas Kadis, cuando visitó Galicia y la posibilidad de estar presentes en los encuentros sobre la financiación plurianual de la UE. Estos espacios de trabajo confirman el avance en visibilidad, escucha y participación de las mujeres del mar.

¿Dónde está la lucha de las mujeres del mar? 
Los temas de lucha no son exclusivos de la pesca. Afectan a todas las trabajadoras. La conciliación familiar, la mejora de las condiciones sociolaborales o el impulso al emprendimiento son pilares fundamentales. Estas demandas son comunes a muchos sectores, pero en el pesquero se agravan por la dureza del trabajo, la invisibilidad histórica y la falta de reconocimiento. Desde Anmupesca trabajamos para que estas reivindicaciones se traduzcan en políticas públicas que garanticen sostenibilidad y justicia.

¿Qué aportan las mujeres al sector y a la economía azul? 
Las mujeres somos parte esencial, aunque históricamente invisibilizada, de toda la cadena mar-industria. Desde Anmupesca impulsamos el reconocimiento de esa contribución y su representación en todos los espacios de decisión. La perspectiva de género aporta una mirada integral: mejora de condiciones laborales, modelos sostenibles, empleo local y valor añadido. La igualdad no es decorativa, es operativa.

La presencia femenina en la gestión del sector es numerosa…
La presencia de mujeres en instituciones y asociaciones es fruto de años de esfuerzo colectivo, capacidad técnica y perseverancia. Referentes como Carmen Crespo, Isabel Artime, Aurora de Blas, Elena Martínez, Marta Villaverde, M.ª Luisa Álvarez y muchas otras. Todas representan trayectorias brillantes y el resultado de una lucha compartida. Aún queda camino por recorrer. Necesitamos garantizar la equidad en todos los niveles de decisión, incorporar indicadores sociales y datos desagregados por sexo en los diagnósticos sectoriales.

¿Es suficiente la presencia femenina en la “base” del sector? 
La presencia de mujeres en puertos, lonjas, conserveras, empresas de transformación y comercialización es muy relevante, pero sigue siendo poco visibilizada. Somos el eslabón invisible que sostiene la cadena mar-industria. Desde Anmupesca trabajamos para que ese trabajo sea reconocido, protegido y dignificado. Las mujeres no solo estamos. También innovamos, sostenemos y somos clave para el futuro del sector.

¿Cómo animamos a las niñas a trabajar en el mar? 
Transmitiéndoles nuestro amor por el sector. Las mujeres del mar destacan por su pasión, incluso en momentos difíciles. El sector pesquero permite vivir dignamente, aunque atraviesa ciclos. Somos fuertes, luchadoras y resilientes. Debemos convertirnos en referentes para sembrar vocaciones desde la infancia, mostrando la diversidad de oficios: mariscadoras, rederas, pescadoras, científicas, armadoras, transformadoras, biólogas, pescaderas…

¿Qué relación desea tener con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación? 
Valoramos el diálogo abierto con la Secretaría General de Pesca. Queremos consolidar una colaboración estable, eficaz y con perspectiva de género. 
Nuestro objetivo es que las políticas públicas reflejen la realidad de las mujeres del mar, mejoren sus condiciones laborales y promuevan su liderazgo. Anmupesca quiere ser esa voz firme y colectiva que traslade necesidades reales y garantice el acceso libre y seguro a los espacios de representación. 

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