Observadores científicos
Pesca
Los observadores científicos son hombres y mujeres con titulaciones superiores del entorno de la biología marina, ciencias del mar o ambientales, que desarrollan su actividad tanto en aguas nacionales como internacionales, ya sea en embarcaciones, plataformas, instalaciones marinas o a pie de lonja por un periodo de tiempo determinado y cuyo fin es realizar una contribución para el bien común, como es el de preservar la vida y los recursos marinos para futuras generaciones.
La función del observador se basa principalmente en la observación, control y toma de datos en las actividades industriales realizadas en el medio marino, para la posterior redacción de informes de carácter científico, de control, consultor y/o conservacionista. En otras palabras, los observadores científicos suministran los datos esenciales que forman una base científica determinante para la toma de decisiones sobre la gestión de los recursos oceánicos. También recogen información sobre el cumplimiento de la normativa vigente, las directrices de conservación para las administraciones nacionales, organismos internacionales y/o entidades de investigación públicas o privadas.
DATOS APORTADOS
De esta manera, los datos aportados por estos profesionales son clave para el desarrollo de políticas efectivas de protección ambiental, gestión sostenible y conservación de mares y océanos. En virtud de esta información, es posible: el desarrollo de políticas pesqueras con base científica; evaluaciones de impacto ambiental de determinadas actividades industriales como pueden ser las energías renovables o la extracción de recursos del subsuelo, entre otras. También es posible el análisis del cumplimiento de medidas de gestión pesquera según normativa vigente, así como multitud de informes científicos indicadores del estado de conservación de determinadas áreas marinas. El observador científico como ya hemos ido mencionando engloba varios ámbitos, y según este, estos profesionales son nombrados de diferentes formas:
OBSERVADOR PESQUERO
Es aquel que desarrolla su trabajo en la industria pesquera o en investigación, pero también relacionada con las actividades pesqueras, trabajando a bordo de buques de pesca o de investigación durante un tiempo determinado, comúnmente denominado marea, al igual que el resto de la tripulación.
Las funciones que realizan generalmente son la toma de datos: como posición del buque, registro de las diferentes actividades de pesca, registro de capturas, registros de datos ambientales y la realización de muestreos de las especies capturadas, ya sean especies objetivo o descartes, así como la toma de muestras biológicas. También realizan dependiendo de los casos funciones de control sobre la industria, asegurando que se cumplen con las diferentes normativas nacionales e internacionales que se aplican a cada pesquería por las Organizaciones Regionales de Ordenación Pesquera (OROP). Por último, estos observadores desarrollan informes de carácter técnico-científico que serán la base para el desarrollo de políticas pesqueras que se encarguen entre otras cosas de mantener un equilibrio entre conservación y explotación de las diferentes especies.
OBSERVADOR DE LONJA
También desarrolla su actividad dentro de la industria pesquera y de investigación, pero no embarca como el resto de la tripulación, sino que espera a que los diferentes buques lleguen a puerto y descarguen su captura para así poder trabajar con ella. Estos observadores generalmente realizan un muestreo a pie de lonja que consiste en tomar medidas y pesos de las diferentes especies, también toman muestras biológicas y por último generan un informe que a nivel nacional se incluirá como parte de la RIM (Red de Información y Muestreo de desembarques de especies en puerto) que de igual modo servirá para el desarrollo de las diferentes políticas pesqueras.
MAMÍFEROS MARINOS
Observador de mamíferos marinos, comúnmente llamados MMOs, por sus siglas en inglés Marine Mammal Observers, estos observadores trabajan para diferentes industrias como son la eólica, el gas y petróleo, construcción y desmantelación de plataformas, instalación de tuberías y cables submarinos, e investigación. En general estos observadores desarrollan su actividad a bordo de buques o de instalaciones marinas, y su función es las de aplicar las diferentes normativas nacionales o internacionales para proteger del ruido submarino generados por estas industrias a los mamíferos marinos y a las tortugas, para ello estos observadores deben asegurarse de que no hay animales en la zona de actuación mediante la observación directa o por medio de hidrófonos. Aunque a este grupo se les denomina como MMOs en realidad estos profesionales se dividen en dos secciones los MMOs que se dedican a la observación visual utilizando binoculares y cámara de fotos para determinar la presencia de especies en el área y los operadores de acústica pasiva, PAMos por sus siglas en ingles Passive Acoustic Monitoring Operators, que utilizan hidrófonos y diferentes equipos y programas informáticos para detectar la presencia de mamíferos marinos en el área.
Estos observadores también tomarán datos de posicionamiento del buque, de las actividades de este y de carácter ambiental con los que generarán informes que ayudarán a entender el comportamiento de las diferentes especies frente a estas actividades y a compaginar la industria con la conservación de dichas especies.
CREACIÓN DE LA APOCM
Una de las características principales del trabajo del observador es que se realiza de forma autosuficiente e independiente, pero sometido a las mismas condiciones laborales de dureza que cualquier otro tripulante, por lo que se podría decir que un observador se encuentra “solo frente al peligro”, además debido a la gran disgregación del colectivo por todo el territorio nacional, generaba diversas dificultades y sensación de soledad en el gremio, por lo que la idea de unirse en colectivo fue tomando forma y tras varios intentos fallidos en abril del 2022, justo a consecuencia del trágico accidente del buque de pesca Villa de Pitanxo, en el que fallece un observador junto con otros tripulantes, un grupo de varios observadores decide dar forma a esa unión naciendo así la Asociación de Profesionales de la Observación Científica Marina (APOCM), siendo esta la primera asociación profesional de los observadores científicos no solo a nivel nacional sino también europeo.
En ella se agrupan todos los profesionales de la observación científica de España.
Desde su creación, dicha asociación ha reunido en torno al 90% de los profesionales de la observación marina en España que se encuentran en activo, siendo estos según las últimas estadísticas un total de 148 personas asociadas (88 mujeres y 60 hombres) cifra que se espera siga aumentando en años sucesivos. De ellos, un 40% de profesionales llevan entre 1 y 5 años ejerciendo esta profesión y casi el 20% más de 10 años, por lo que se puede decir que la observación científica marina no es un trabajo circunstancial ni temporal, como ha sido considerado durante muchos años.
Es de destacar que esta experiencia de los profesionales aporta datos de gran calidad científica a la hora de su uso en la gestión de los ecosistemas, siendo la experiencia el valor añadido de mayor importancia después de la formación. Desde su creación la asociación ha estado trabajando de forma altruista en la dignificación de la profesión y la creación de un espacio de encuentro en el que todos los observadores puedan reunirse, compartir ideas e inquietudes, y para ello se empezó por dar a conocer la figura del observador al público en general y a las autoridades e instituciones en particular, a la vez que se lucha por una serie de reivindicaciones como son la plena entrada en el Régimen Especial del Mar (REM), la aplicación de coeficientes reductores, salarios justos y creación de convenio colectivo entre otras.
La aparición de APOCM sin duda crea un panorama que genera buenas expectativas para la continuidad de la profesión a nivel nacional e internacional y motiva a profesionales de otros países a seguir sus pasos, como nuestros vecinos portugueses que recientemente crearon la asociación profesional de observadores del ambiente marino, APOAM por sus siglas en portugués, con los que se colabora de forma activa al igual que con otros organismos y asociaciones, como la asociación de observadores profesionales de Estados Unidos, APO, por sus siglas en inglés, consiguiendo así un mayor reconocimiento internacional.
Asociación Profesional de
la Observación Científica
Marina (APOCM)