La reunión informal de ministros de Pesca, organizada por la Presidencia española del Consejo de la Unión Europea en Vigo, puso de relieve la necesidad de avanzar en una estrategia para la descarbonización del sector pesquero y acuícola, así como de analizar las inversiones necesarias para mejorar su sostenibilidad. Durante su estancia en la ciudad, los responsables de la pesca comunitaria también visitaron la lonja del puerto y el buque escuela de cooperación pesquera Intermares.

El Palacio de Congresos Mar de Vigo fue el escenario donde, enmarcada en la Presidencia española del Consejo de la UE, se celebró la reunión informal de ministros de Pesca. Al encuentro asistieron los responsables de las políticas pesqueras europeas, tanto de la Comisión como de los diferentes Estados miembro, así como los representantes de  organizaciones de productores y empresas pesqueras de España y Europa, de la Federación Europea de Acuicultura, de la Red Europea de Mujeres de la Pesca e integrantes de la sección de Pesca del Sindicatos Europeo del Transporte.

Sobre la agenda estaba la necesidad de avanzar en una estrategia comunitaria para la descarbonización del sector pesquero y acuícola pero también el análisis de los instrumentos y mecanismos financieros que ayuden a los pescadores a llevar a cabo la transición ecológica de la flota. No se trata solo de cumplir con los objetivos del Pacto Verde europeo y de llegar al año 2050 sin producir emisiones netas de gases de efecto invernadero sino también de garantizar la rentabilidad socioeconómica del sector, haciendo que dependa menos de combustibles fósiles y de la gran volatibilidad que experimentan sus precios, mejorando las condiciones laborales de sus trabajadores.

La relevancia de la flota comunitaria a nivel mundial se debe tanto por el volumen de embarcaciones que la componen y del número de personas que trabajan directa e indirectamente en la actividad como por el valor de las transacciones económicas que genera, ya que la Unión Europea es uno de los principales importadores de productos del mar. Bruselas aspira por ello a liderar los foros internacionales pesqueros y exportar a terceros países un modelo de pesca sostenible desde el punto de vista social, económico y medioambiental.

TRANSICIÓN ENERGÉTICA

La reunión, según explicó el ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, fue “una gran ocasión para intercambiar ideas y extraer conclusiones que beneficien al sector, permitiéndole avanzar hacia la neutralidad climática en 2050”. La estrategia debe ir acompañada de líneas de inversión públicas que faciliten esa renovación de la flota con barcos más eficientes desde el punto de vista energético e impulsar la innovación y el desarrollo tecnológico de la industria naval, algo que apoya completamente nuestro país.“No es algo que vaya a producirse de hoy a mañana. Iniciamos un proceso que aún tardará tiempo, pero es importante lanzar el mensaje y romper el tabú de que no puede haber financiación para la construcción de barcos”, subrayó Planas.

La flota pesquera europea está compuesta por más de 70.000 embarcaciones. Se trata mayoritariamente de barcos de pequeña escala que tienen una edad media elevada (alrededor de 30 años), y que afronta el reto de la descarbonización con incertidumbre. Por ello, a lo largo de la Presidencia española se insistirá en que los fondos europeos se dediquen a la construcción de buques, acordes con las necesidades del siglo XXI

Los ministros europeos visitaron el buque Intermares

El comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virjinijus Sinkevicius, aseguró por su parte que “podemos hacer la transición hacia una industria pesquera más resiliente y responsable con el medio ambiente, que contribuya al desarrollo regional y a la creación de empleo en la UE”. Según Sinkevicius, existe un “amplio abanico de posibilidades” para investigar y avanzar en innovaciones tecnológicas pero descartó que vaya a abrirse un “nuevo fondo europeo” para financiar el proceso. En este sentido, instó a los actores privados a complementar el necesario esfuerzo que debe realizar el sector. Sí se mostró en cambio abierto a debatir sobre los límites de capacidad de la flota comunitaria y a “cambiar la fórmula” sobre los techos que limitan la potencia de los barcos y su capacidad, algo que demanda el sector. 

Para el presidente de la Cooperativa de Armadores de Pesca del Puerto de Vigo (ARVI), Javier Touza, la financiación pública para la construcción de nuevos barcos adaptados a las nuevas tecnologías es completamente necesaria. “Si para el comisario europeo el nuevo FEMPA es “pequeño para financiar esa renovación”, hay alternativas como fondos “ad hoc” o acudir al Banco Europeo de Inversiones. Si existe un plan renove para coches, ¿por qué no puede existir otro para barcos?”, pregunta.

En otro orden de cosas, España ha planteado que se concreten tasas plurianuales de capturas para algunas especies, en vez de las de carácter anual, con el objetivo de favorecer una mejor planificación de la actividad y un aprovechamiento más eficiente de las cuotas de pesca. Asimismo, quiere promover en este semestre uno de los ejes prioritarios de la Política Pesquera Común (PPC): el necesario equilibrio entre la sostenibilidad medioambiental, económica y social de la pesca y debatir cómo reforzar el papel de esta política para progresar en la autonomía abierta de la Unión Europea.

Durante su estancia en Vigo, los ministros europeos de Pesca visitaron el buque escuela y de cooperación pesquera Intermares, auténtica universidad flotante que, con su actividad formativa, “contribuye a una de las máximas para el sector: el mejor conocimiento científico para la toma de las mejores decisiones en la gestión pesquera”, dijo Planas.  También se acercaron a las instalaciones de la lonja en el puerto de la ciudad, considerado uno de los primeros comercializadores de pescado fresco y congelado para consumo humano del mundo. Ambos son ejemplos de la relevancia que tiene la actividad pesquera en el litoral español, especialmente en Galicia donde se encuentra la mitad de los 8.700 buques que componen nuestra flota.

No será la reunión de Vigo la única donde se traten asuntos pesqueros durante la Presidencia. En el marco de las acciones que nuestro país ha programado para este semestre está prevista la celebración de un encuentro de los directores de pesca de los Veintisiete, que será en Málaga a finales de septiembre.

INFORME DEL CESE

Javier Garat, secretario general de Cepesca y presidente de Europêche, presentó a los ministros de Pesca de la UE el dictamen del Comité Económico y Social Europeo (CESE) sobre descarbonización de la flota, aprobado por unanimidad en su pleno del 12 de julio.
El dictamen especifica el compromiso de la flota pesquera comunitaria para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera pero califica de “enorme” el coste que conllevará la descarbonización debido a factores como el escaso desarrollo de fuentes de energía verdes o neutras sustitutivas; la edad media de la flota europea, que imposibilita adaptar muchos de los barcos a los mayores espacios que requerirán los futuros motores, o las contradicciones de la Política Pesquera Común (PPC) estableciendo límites a la capacidad de tonelaje bruto (el espacio a bordo) e imposibilitando mayor espacio para las futuras formas de propulsión. 
De acuerdo con el CESE, si Europa quiere una flota descarbonizada y competitiva que asegure a sus ciudadanos la seguridad alimentaria frente a la capacidad pesquera del resto del mundo, hay que traspasar el ámbito actual de financiación europea y crear un fondo de emergencia capaz de acelerar el proceso con éxito.