Las acciones llevadas a cabo con drones son costosas ya que el personal que los maneja debe estar altamente cualificado. Sin embargo, cuando los proyectos son viables, los resultados obtenidos con su empleo son claramente satisfactorios. 

En nuestro país son varias las empresas y administraciones que utilizan drones en diferentes ámbitos del sector marítimo-pesquero. Uno de los proyectos más avanzados es el desarrollado por la compañía General Drones, junto a Salvamento Marítimo y la Generalitat Valenciana, para reforzar las labores de vigilancia y prevención en las playas.

“Las aeronaves no tripuladas se han convertido en una herramienta sumamente útil que permite la detección rápida de personas que se encuentran en peligro en el mar. Los drones de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias han salvado la vida a seis personas en acciones directas de rescate, gracias a los 851 vuelos que realizaron a lo largo de 2.137 kilómetros de costa. El salvamento justifica plenamente todos nuestros esfuerzos”, dice la consellera de Justicia, Interior i Administració Pública valenciana, Gabriela Bravo.

SALVAR VIDAS 

El proyecto “Stop Ahogamientos”, enmarcado dentro del plan #PlatgesSegures, consiste en implantar drones de rescate, como el Auxdron LFG, en 20 municipios costeros de la Comunidad Valenciana. 
La localidad de Sagunto fue pionera en implantar esta tecnología en el año 2017 con los primeros casos de éxito en salvamento marítimo. El más importante fue en julio del pasado verano cuando un chico de 14 años quedó atrapado por la corriente marina. Las condiciones del mar impedían la actuación de los equipos de socorro. El dron lanzó al joven un flotador salvavidas desde el aire, lo que le permitió mantener la flotabilidad y aguantar hasta la llegada de los socorristas. 

Gracias a la rápida actuación conjunta de la aeronave, su piloto, y el servicio de socorrismo, el joven fue rescatado con vida cuando estaba a punto de quedarse inconsciente, las olas le sobrepasaban y ya estaba exhausto. “Cada segundo cuenta en momentos como éste. Por eso, el empleo de drones en estas situaciones es muy importante”, explica Miguel Pedrero, piloto de la empresa General Drones.

Otro proyecto interesante es el USV Vendaval. Se trata de un barco capaz de realizar misiones de salvamento en el mar, protección ambiental, seguridad, o labores portuarias de manera totalmente autónoma.

El Vendaval es el primer vehículo de superficie no tripulado comercializado y operativo en misiones en nuestro país. Está operativo en el puerto de Ceuta desde 2019 y se emplea en acciones de vigilancia y control medioambiental dentro del Sistema de Vigilancia de Aguas Próximas (SVAP). 
Se trata de una herramienta efectiva para proteger la costa ceutí al proporcionar una solución rápida a los problemas frente a condiciones del mar adversas y minimizando el riesgo humano.

BUNKERING 

La empresa Drones Maritime ha implantado un sistema de recogida de muestras de combustible que se producen en los repostajes de los buques fondeados en la Bahía de Algeciras.

El bunkering permite a los barcos repostar en alta mar mediante buques cisterna que funcionan como gasolineras flotantes. En cada repostaje se recogen tomas del combustible en unas botellas que se llevan a un laboratorio para certificar que el gasoil suministrado se ajusta al contratado. Hasta que estas muestras no son analizadas, no puede utilizarse el carburante, lo que retrasa la salida de los barcos.

En la actualidad, los barcos que realizan esta labor tardan alrededor de dos horas entre ida y vuelta, lo que conlleva un coste elevado no solo por el personal y el barco desplazado sino también por el combustible quemado y la contaminación producida. Para acelerar el proceso y minimizar el riesgo de contaminación se utilizan aparatos, como el Dron Vtol. De este modo, la operación es mucho más rápida (con una media inferior a los 20 minutos) y como se utilizan aparatos con motores eléctricos, también es eficiente y sostenible.

“Esto sólo está empezando. En el ámbito marítimo, que es donde nosotros nos enfocamos, el uso de drones aún es muy limitado. Las aplicaciones en el futuro serán múltiples en logística, vigilancia, seguridad y autoprotección de las embarcaciones. Ahora estamos en fase de pruebas pero esperamos ser totalmente operativos en la primera mitad de este año”, comenta Iván Alvarez, director de Drones Maritime.

SEGURIDAD MARÍTIMA

Las administraciones públicas también se interesan por el uso de drones en actividades en el mar. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) ha sido precursor en este sentido desarrollando, desde el año 2018, cuatro proyectos en colaboración con la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA), para comprobar el funcionamiento de aeronaves no tripuladas en misiones específicas de búsqueda y rescate, lucha contra la contaminación, vigilancia marítima, control de fronteras y lucha contra el narcotráfico.

En 2021 se realizaron los primeros despliegues con drones para controlar las emisiones de buques y para la vigilancia aduanera en el área del Estrecho de Gibraltar. Las misiones eran seguidas en remoto por personal de la Dirección General de la Marina Mercante utilizando la plataforma EMSA RPAS DC que proporcionaba instrucciones a los pilotos. Con ella se midieron las emisiones de 340 buques y se realizaron misiones de vigilancia marítima.

Tras los buenos resultados, se realizaron en 2022 otras acciones en un área de mayor cobertura y un uso más alto del dron, llegando a volar en algunos días hasta doce horas y realizando misiones de vigilancia nocturna en colaboración con el Servicio de Aduanas. 
También se han utilizado drones más pequeños en despliegues locales, como los ejercicios de lucha contra la contaminación realizados por la Subdirección General de Protección del Mar en colaboración con las comunidades autónomas, y en los ejercicios nacionales de lucha contra la contaminación marina realizados por Salvamento Marítimo en Castellón, en el año 2021 y en Bilbao, durante 2022.

“En el caso del accidente marítimo del OS-35 en Gibraltar, la utilización de los drones se reveló como una herramienta de gran utilidad en la lucha contra la contaminación. Dadas las características del combustible a bordo y las condiciones atmosféricas, no se veía la cubierta del buque desde el mar. La única manera de tener una visión correcta de la situación era desde el aire. El uso de drones resultó ventajoso frente al empleo de helicópteros, no sólo por el coste económico sino también por la recepción de imágenes en tiempo real ", afirma Federico Navarro Cabrera, jefe de Servicio de la Subdirección General de Seguridad, Contaminación e Inspección Marítima.

Actualmente se están considerando dos proyectos para avanzar en el empleo de drones en el ámbito marítimo. El primero se orienta a utilizar estos aparatos con más horas de autonomía, ampliando su rango de acción para cubrir una gran zona de la costa y realizando operaciones conjuntas entre Portugal y España. El segundo usa los drones para controlar las emisiones de los buques en el puerto de Barcelona. 

Por otro lado, la Autoridad Portuaria de Almería (APA) acaba de crear su propia operadora de vuelo de aeronaves pilotadas por control remoto, lo que la convierte en el primer organismo público portuario en operar con drones.