PLAN PARA REDUCIR LAS CAPTURAS ACCIDENTALES EN LA ACTIVIDAD PESQUERA

Objetivo a diez años vista

01/02/2022

Pesca

Ana Díaz
Pescadores sacando un pez de la red de pesca

Con este Plan Nacional para la reducción de las capturas accidentales en la actividad pesquera, España muestra de nuevo su interés en poner freno al problema de la pesca accidental de especies protegidas, pese a las acusaciones que la Comisión Europea ha hecho, en repetidas ocasiones, a nuestro país y a otras naciones de nuestro entorno de no hacer lo suficiente por evitar la captura accidental de cetáceos en zonas del Cantábrico noroccidental y en el Golfo de Bizkaia, donde nuestros arrastreros llevan dispositivos acústicos de disuasión (“pingers”), líneas espantapájaros o largado del arte durante la noche para evitar que caigan en las redes.

El Plan se plantea como una guía de evaluación y seguimiento de las capturas accidentales de nuestros pesqueros. Al mismo tiempo, propone soluciones técnicas para reducir o eliminar la pesca de especies protegidas.

Las acciones contempladas en el Plan deberán desarrollarse a lo largo de la próxima década para que, en el año 2030, se alcance un nivel de impacto que no ponga en peligro las poblaciones de especies afectadas. Las medidas adoptadas tienen como objetivo reducir a niveles mínimos las capturas accidentales, siempre por debajo de los valores de retirada máxima biológica para cada especie. Además, permitirán complementar los trabajos para conocer el estado de las poblaciones de cetáceos así como el volumen de capturas accidentales y las causas de varamientos en las playas, habituales especialmente en los meses de invierno.

PESCA MÁS SOSTENIBLE

Uno de los principales objetivos del Plan es el desarrollo de una campaña de evaluación, con un protocolo establecido, para estimar el número de ejemplares capturados por nuestros pescadores. Por otra parte, se ha establecido un total de ocho acciones que ayudarán a que la actividad de nuestra flota sea más sostenible. 

Además, el Plan incluye un órgano colegiado de trabajo compuesto por representantes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el Ministerio de Ciencia e Innovación, a través del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que garantizará la unidad y la coordinación de las acciones para alcanzar los objetivos planteados.

“Pese a que el propio Plan habla de un proceso participativo, para el que no fuimos en absoluto consultados, valoramos de manera positiva la medida aprobada por el Gobierno. Parece que por fin va a empezar a tomar en serio el gran problema de la mortalidad de cetáceos por captura accidental, una de las principales amenazas para la conservación de estas especies a lo largo de toda la costa española. Sin embargo, consideramos que llega tarde y no alcanza lo deseado ya que se puso en marcha realmente por presiones de la Comisión Europea y no por iniciativa propia del Gobierno. Por tanto, va a remolque y tenemos serias dudas sobre si se va a actuar de manera firme”, aseguran desde la Coordinadora para el Estudio de Mamíferos Marinos (CEMMA).


 

CON LA NORMATIVA EUROPEA

La protección de mamíferos, tortugas y aves marinas se enmarca dentro de la Directiva de la Unión Europea para la conservación de los Hábitats Naturales y de la Fauna y Flora Silvestres y de la Directiva sobre la conservación de las aves silvestres. A nivel estatal, la Ley de Patrimonio  Natural y de la Biodiversidad contiene normas que obligan a conservar, proteger y evitar posibles daños a los taxones silvestres.

Por su parte, la Política Pesquera Común establece el principio de sostenibilidad en las actuaciones pesqueras y, por ello, el Reglamento 2019/1241 de la Unión Europea se centra en la conservación de los recursos pesqueros y la protección de los ecosistemas marinos con medidas técnicas, estableciendo medidas para mitigar los daños en especies sensibles como los cetáceos, las aves y las tortugas marinas. En este sentido, el MAPA publicó una Orden para mitigar el impacto de la pesca accidental de cetáceos mediante el uso de dispositivos acústicos hace justo un año.

Desde Cepesca consideran que el Plan responde a la necesidad de cumplir con los objetivos planteados en las directrices comunitarias para ayudar a reducir el impacto de la actividad pesquera sobre especies sensibles de ser capturadas accidentalmente. “Nos hubiera gustado participar más activamente en el diseño y elaboración de este Plan para aportar nuestro conocimiento y nuestra experiencia. No obstante, vamos a trabajar de manera activa y en colaboración con la Administración para que las medidas que finalmente se adopten sean efectivas, al tiempo que permitan continuar con la rentabilidad de la actividad pesquera”, afirma el secretario general de la organización, Javier Garat. 

Actualidad