COCINA A BORDO

Vasito de crema de queso fresco y mango

16/12/2024

ISM

ISM al día

Jose Manuel Canosa y Esteban Filgueira (cocineros) y la doctora Celia López
crema de queso y mango
Ingredientes para 4 personas:

Crema de queso fresco
  • 150 gr queso crema o requesón
  • 30 gr azúcar glass
  • 120 ml nata montar
  • Base galleta
  • 50 gr mantequilla
  • 70 gr frutos secos (nueces, avellanas...)
  • 100 gr galletas integrales

Natilla
  • 65 gr azúcar
  • 5 yemas de huevo
  • 500 ml leche
  • 20 gr maicena
  • Piel limón/canela en rama
  • 2 piezas de mango maduro
  • Ramita de menta (decoración)
Preparación:

Para la natilla


Paso 1

Infusionar la leche con el limón y la canela. Aparte mezclar en frío azúcar, maicena y huevo. Desleír esta mezcla con la leche, colar y poner a calentar hasta conseguir la consistencia de la natilla. Reservar y enfriar.

Paso 2

Una vez frío, mezclar con la pulpa triturada de un mango maduro.

Para la crema de queso

Batir el queso con el azúcar glass. Semimontar la nata y añadir a la mezcla anterior con movimientos envolventes. Reservar. En caso de usar requesón, escurrir bien antes.

Para la base

Triturar las galletas, picar frutos secos, fundir la mantequilla y mezclar hasta obtener una
pasta arenosa.

Presentación

Poner en fondo del vasito la mezcla de la base. Disponer encima con manga la crema de queso. Colocar unos dados de mango y a continuación cubrir con la natilla de mango. Decorar con la mezcla de la base, unas tiras de mango y una ramita de menta.

VALORACIÓN NUTRICIONAL

Recomendamos utilizar requesón ya que su contenido graso es menor que la mayoría de los quesos y sobre todo del queso crema que contiene además nata.
En personas con enfermedades cardiovasculares o diabetes aconsejamos adaptar el postre quitando la nata y la mantequilla y reduciendo el azúcar añadido.

IMPORTANTE FUENTE PROTEICA. El requesón contiene cuatro veces más proteínas que la leche; además, sus proteínas son de alto valor biológico, es muy rico en seroproteínas que contienen todos los aminoácidos esenciales.
Este derivado lácteo es una opción como hemos visto muy saludable, pero tomado en exceso podría desencadenar algunos problemas de salud, como aumentar la presión arterial o problemas renales.

El huevo también posee proteínas de elevado poder biológico. Los frutos secos, por su parte, contiene cantidades importantes de proteínas de calidad media debido, principalmente, a que algunos aminoácidos esenciales están presentes, aunque en pequeñas cantidades.


RICO EN MINERALES Y VITAMINAS. El mango contiene minerales y antioxidantes, además de fibra, calcio, potasio, magnesio y ácido fólico. Es una excelente fuente de vitaminas A, C y del grupo B, importantes para el sistema nervioso y el correcto funcionamiento del metabolismo. Rico en magnesio, que se relaciona con el buen funcionamiento del intestino, nervios y músculos, y mejora la inmunidad. Contiene potasio, mineral necesario para la transmisión y generación de los impulsos nerviosos y para la actividad muscular normal. Aporta fibra que mejora el tránsito intestinal.

RECUADRO ESPECIAL
APRENDE A DIFERENCIAR. Las grasas son una parte importante de su dieta, pero algunos tipos son más saludables que otros. Escoger con mayor frecuencia grasas saludables de origen vegetal en lugar de grasas menos saludables de origen animal, le ayudará a disminuir el riesgo de sufrir un ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y otros problemas de salud mayores. Todas las grasas están compuestas de ácidos grasos saturados e insaturados. Se denominan saturadas o insaturadas dependiendo de cuánta cantidad de cada tipo de ácido graso contienen.

GRASAS SATURADAS: Por lo general, las grasas saturadas se encuentran en estado sólido a temperatura ambiente. Las fuentes más frecuentes de grasas saturadas son las carnes y los productos lácteos, especialmente en mantequilla y nata. Las grasas saturadas elevan el nivel de colesterol LDL (“malo”).

GRASAS INSATURADAS: Hay dos tipos de grasas insaturadas: monoinsaturadas y poliinsaturadas. Los frutos secos tienen un alto contenido de grasa (aproximadamente el50%), mayoritariamente insaturada, ya sea monoinsaturada o poliinsaturada como en las nueces. El huevo incluye un alto contenido de ácidos grasos monoinsaturados. Su consumo, especialmente el de las poliinsaturadas, se asocia con un menor riesgo de muerte por patologías cardiovasculares y cáncer en comparación con los que mantienen un consumo elevado de grasas saturadas.

Los autores

Grupo de Nutrición Saludable Sanidad Marítima formado por la doctora de Sanidad Marítima Celia López Carballido. Receta elaborada por José Manuel Canosa y Esteban Filgueira (cocineros del buque hospital Esperanza del Mar).


Ver número 651 de Revista MAR
 

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