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El Anuario Estadístico 2024 confirma la fortaleza del sistema portuario español, que cerró el ejercicio con 557,8 millones de toneladas movidas, un 2,6% más que en 2023. La mercancía general bate récords, el tráfico de contenedores crece a doble dígito y los pasajeros alcanzan cifras históricas. Sin embargo, la sostenibilidad, la digitalización y la competencia internacional marcan los retos del futuro.
El transporte marítimo sigue siendo la columna vertebral del comercio exterior español. Según el Anuario Estadístico del Sistema Portuario de Titularidad Estatal, publicado por Puertos del Estado, el tráfico total alcanzó los 557,8 millones de toneladas, lo que supone un incremento del 2,6% respecto a 2023. Aunque no se superó el récord histórico de 2019 (564,6 millones), la tendencia es positiva y consolida la recuperación iniciada tras la pandemia.
La mercancía general se erige como protagonista: 278,5 millones de toneladas, un 6,1% más que el año anterior, impulsada por el repunte del tráfico contenerizado en tránsito (+10,3%). Este segmento representa ya el 51% del total, confirmando la importancia de la logística intermodal y la especialización de las terminales.
Luces y sombras
Los graneles líquidos crecieron un 2% hasta los 178,8 millones de toneladas. El petróleo crudo (+4,7%), la gasolina (+29,8%) y el gasoil (+6,5%) compensaron la fuerte caída del gas natural (-26,3%). El tránsito de productos petrolíferos y químicos se disparó un 16,2%, favorecido por los desvíos de rutas tras los ataques en el mar Rojo, que obligaron a modificar itinerarios globales.
En cambio, los graneles sólidos sufrieron un retroceso del 6,4%, hasta 84,8 millones de toneladas. La descarbonización y el cierre de centrales térmicas hundieron el tráfico de carbón (-41,2%), mientras que los cereales y sus harinas bajaron un 14,2% tras el fin del ciclo de acumulación de stocks provocado por la guerra en Ucrania. Solo los minerales y residuos metálicos (+12,7%) y algunos tráficos agroalimentarios amortiguaron la caída.
Un 15% más
El tráfico de contenedores alcanzó los 18,1 millones de TEU, un 10,7% más que en 2023, con un crecimiento notable en tránsito (+15,3%). Este dato refuerza la posición estratégica de España en las rutas Este-Oeste y Norte-Sur, gracias a puertos como Algeciras, Valencia y Barcelona, que concentran el 46% del tráfico total.
Pasajeros en cifras históricas: más de 40,9 millones, con 12,8 millones de cruceristas.
El ro-ro, vinculado al transporte rodado, también avanzó, aunque de forma más moderada (+1,1%), con 72,6 millones de toneladas. Las conexiones con el norte de África y las islas Baleares y Canarias siguen siendo claves para el movimiento de productos hortofrutícolas, textiles y ganado.
Pasajeros y cruceristas
El tráfico de pasajeros en los puertos españoles alcanzó en 2024 un récord histórico de 40,9 millones de personas, lo que supone un incremento del 4% respecto a 2023. Este crecimiento confirma la recuperación del turismo marítimo y consolida a España como uno de los destinos más atractivos del Mediterráneo y el Atlántico.
Del total, 28 millones de pasajeros corresponden a líneas regulares, con un aumento del 2,7 %, impulsado por la Operación Paso del Estrecho, las conexiones con Baleares y Canarias y el refuerzo de rutas con el norte de África. Este segmento mantiene su papel esencial en la movilidad entre la península y los archipiélagos, así como en el transporte de vehículos en régimen de pasaje.
Por su parte, el tráfico de cruceros registró un crecimiento del 6,8%, alcanzando 12,8 millones de cruceristas, lo que marca un nuevo máximo histórico. Puertos como Barcelona, Baleares y Las Palmas lideran este segmento, gracias a su capacidad para operar megabuques y ofrecer servicios especializados. Barcelona destaca especialmente en operaciones de turnaround, donde los pasajeros inician o finalizan su viaje, consolidando su posición como puerto base en el Mediterráneo
Este auge del crucero no solo refleja la recuperación del turismo internacional, sino también la apuesta por itinerarios sostenibles y experiencias premium. Las navieras han incorporado buques más eficientes, con sistemas de reducción de emisiones y conexión eléctrica en puerto (OPS), alineándose con los objetivos europeos de descarbonización.
El impacto económico es significativo: cada escala genera actividad en sectores como hostelería, transporte, comercio y servicios turísticos, dinamizando las economías locales y proyectando la imagen de España como destino seguro y competitivo. Además, el crecimiento del tráfico de pasajeros refuerza la necesidad de infraestructuras modernas, digitalización de procesos y estrategias de sostenibilidad para mantener la competitividad en un mercado global en expansión.
En tres puertos
El mapa portuario español mantiene una marcada concentración en tres enclaves que canalizan casi la mitad del tráfico nacional. Bahía de Algeciras conserva el liderazgo gracias a su posición estratégica en el Estrecho y a la especialización en contenedores y graneles líquidos, aunque registra un ligero retroceso respecto al año anterior. Valencia refuerza su papel como plataforma mediterránea impulsada por la mercancía general y el tráfico contenerizado, mientras Barcelona consolida su condición de puerto base con cifras históricas en cruceros y contenedores.
557,8 millones de toneladas movidas en 2024: el sistema portuario español crece un 2,6%.
Este escenario evidencia la dualidad del sistema: grandes hubs internacionales que absorben la mayor parte del movimiento y puertos medianos que buscan nichos para sostener su competitividad. La evolución de cada enclave está marcada por factores globales como la transición energética, la digitalización y la volatilidad de las rutas marítimas, que condicionan inversiones y estrategias futuras.
Otros tráficos
En el panorama portuario español, el año 2024 ha traído consigo una serie de cambios significativos en el tráfico de mercancías y pasajeros. A pesar de la caída del 6,4% en los graneles sólidos, que totalizaron 84,8 millones de toneladas, el sector ha mostrado resiliencia. Esta disminución se debe principalmente a la fuerte baja en la demanda de carbón y coque de petróleo, que se desplomaron un 41,2%. Sin embargo, no todo son malas noticias: los graneles líquidos experimentaron un crecimiento del 2,3%, alcanzando los 178,9 millones de toneladas, lo que indica una recuperación en este segmento.
Por otra parte, el tráfico ro-ro, que se refiere al transporte de vehículos y carga rodada, también ha mostrado un ligero aumento del 1,1%, alcanzando 72,7 millones de toneladas. En cuanto a la actividad de los buques mercantes, se ha registrado un incremento del 1% en el número de unidades que operaron en los puertos españoles, alcanzando un total de 166.129. Este aumento, junto con un crecimiento del 2,5% en el arqueo bruto, sugiere una mayor capacidad y actividad en el sector marítimo.
Retos ineludibles
El crecimiento plantea desafíos en materia ambiental. Puertos del Estado avanza en la electrificación de muelles (OPS), la reducción de emisiones y la gestión eficiente de recursos, alineándose con los objetivos europeos de descarbonización. Sin embargo, la competencia global exige equilibrar sostenibilidad y eficiencia para no perder competitividad. La digitalización es otro eje estratégico. Plataformas inteligentes, trazabilidad mediante blockchain y análisis de datos mejoran la operativa y la seguridad. La ciberseguridad se refuerza ante el riesgo creciente de ataques a infraestructuras críticas. El transporte ferroviario movió 11,6 millones de toneladas, un 5,3 % menos que en 2023, lo que evidencia la necesidad de impulsar la intermodalidad. El Fondo de Accesibilidad Terrestre Portuaria financia proyectos para mejorar las conexiones ferroviarias, clave para reducir emisiones y aumentar la competitividad.
Puerto de Algeciras
El Puerto de Algeciras consolida su liderazgo en el sistema portuario español tras cerrar 2024 con 103,6 millones de toneladas y 4,7 millones de TEUs, situándose entre los cinco primeros de Europa. La dársena gaditana atendió 31.503 buques, incluidos más de 200 megabuques, y mantiene conexiones con 200 puertos del mundo. El enlace con Tánger Med registró 505.000 camiones, cifra que prevé duplicarse antes de 2030. Pese a la caída del 47% en graneles sólidos, los líquidos crecieron un 7,3%, y las exportaciones de aceite de oliva subieron un 8,7%. La Autoridad Portuaria proyecta invertir 505 millones hasta 2028 reforzando su papel estratégico en el Mediterráneo occidental.
Gustavo Santana
Presidente de Puertos del Estado
El Anuario Estadístico más allá de las cifras puntuales, confirma que España consolida su posición como referente logístico del sur de Europa y pieza clave en la logística mundial. Refleja la capacidad de trabajo y adaptación de unos puertos que son auténticos motores de la economía.
Pero sería un error interpretar estas cifras solo en clave de éxito y caer en la autocomplacencia. Detrás de esos datos se esconden retos estructurales de gran calado que marcarán el rumbo del sistema portuario en la próxima década: la sostenibilidad, la digitalización y en general, las herramientas necesarias para impulsar la resiliencia ante la incertidumbre geopolítica y económica.
Para afrontarlos, Puertos del Estado y el sistema portuario de titularidad estatal invertirán más de 7.000 millones de euros entre 2025 y 2029. 7.000 millones que reforzarán las infraestructuras para afrontar los cambios en la demanda, que contribuirán a crear puertos más verdes y digitales, que reforzarán las conexiones viarias y ferroviarias, y que mejorarán la vida de la ciudadanía mediante proyectos puerto-ciudad. La sostenibilidad ya no es una opción sino una exigencia. La transición hacia puertos más verdes -con muelles electrificados, energías renovables y gestión eficiente de recursos y residuos-, será determinante para cumplir los objetivos climáticos europeos y mundiales e impulsar la competitividad. En paralelo, la digitalización representa otro gran salto cualitativo. Los llamados smart ports no son una moda tecnológica, sino una necesidad operativa. El análisis y gestión del dato, la automatización y en general las nuevas tecnologías permitirán reducir costes, mejorar la trazabilidad y ofrecer servicios logísticos más eficientes. El anuario de 2024 es un recordatorio de que crecer no basta. El verdadero desafío será hacerlo de forma sostenible, inteligente y competitiva, y en ello estamos poniendo todo nuestro esfuerzo.