Aunque la pesca en el puerto de Peñíscola tiene profundas raíces históricas, no está exenta de desafíos. La presión sobre los recursos pesqueros, los cambios en el clima y la competencia con la pesca industrial son solo algunos de los factores que requieren una gestión cuidadosa y sostenible de los recursos marinos. Sin embargo, también hay oportunidades para la innovación, la colaboración y la promoción del turismo responsable, que pueden contribuir al desarrollo sostenible de la actividad pesquera del entorno.

En el corazón de la encantadora ciudad costera de Peñíscola, se encuentra la Cofradía de Pescadores San Pedro, una institución arraigada en la historia y la cultura marítima de la región. Desde su humilde origen hasta su papel vital en la comunidad actual, esta cofradía desempeña un papel fundamental como custodios del mar y defensores de las tradiciones pesqueras locales. 

ESPECIES MÁS COMUNES

La temporada de pesca en Peñíscola, al igual que en muchas otras áreas costeras, puede variar dependiendo de diversos factores, incluyendo la especie de peces que se buscan y las condiciones climáticas y oceanográficas. Sin embargo, en general, hay varias temporadas de pesca que son importantes de tener en cuenta. 
 

En el recuadro de arriba se pueden consultar la cantidad en kilogramos de las 12 especies más capturadas, siendo la galera la más abundante.
Entre los meses de enero y marzo la galera está más carnosa y tiene más consistencia al estar ovada resultando mucho más sabrosa, lo que le ha dado un mayor valor y reconocimiento a este crustáceo.

Los meses de mayo a junio pescan el rape, la merluza y el salmonete.
 

En la región del Mediterráneo, la de pesca del atún rojo suele ser de primavera a principios de verano. Esta es una época importante para la pesca comercial y deportiva, ya que el atún rojo es una especie muy valorada.

José Manuel Bayarri, patrón del  barco de arrastre Germans Bayarri, nos comenta: “Para  la cuota del atún rojo nosotros este año hemos comenzado el 10 de abril y seguiremos hasta Navidad con la línea de mano”.

Los barcos de arrastre tienen su muelle de atraque frente a la lonja y durante los meses de julio y agosto, quedan en puerto porque se  establece la veda por el paro biológico para que las especies se reproduzca.
 

ACTIVIDAD PESQUERA

La temporada de pesca de dorada y lubina puede variar, pero generalmente son más activas durante los meses de primavera y verano, aunque también pueden ser pescadas durante otras épocas del año.

Los calamares y los pulpos son especies que suelen ser más activas durante los meses más cálidos del año, especialmente en verano y otoño. La pesca de estas capturas es una actividad importante en Peñíscola y en toda la región mediterránea.

Los bancos de sardinas y boquerones generalmente son más abundantes durante los meses de primavera y verano. Estas especies son importantes tanto para la pesca comercial como para la gastronomía local.
 

Los barcos de artes menores pueden salir a faenar todos los días del año salvo los sábados. El domingo solo pueden echar las redes a partir de las ocho de la mañana, pero no las pueden recoger hasta el lunes.

David Pozo patrón de la embarcación Noreste, de artes menores, nos dice: “Al entrar en puerto voy directamente a mi punto de amarre. Yo guardo mis capturas en la cámara del barco y sobre las 15:30 las acerco en un carro a la lonja y las mantenemos con hielo hasta el momento de la subasta, que es a las 16:30. Una vez termina para las artes menores pasan las capturas de los barcos de arrastre”.

A medida que avanzamos hacia el futuro, la Cofradía de Pescadores San Pedro se enfrenta al desafío de mantener un equilibrio entre la preservación del medio ambiente marino y el sustento de las comunidades pesqueras locales. En última instancia, la Cofradía de Pescadores encarna la conexión profunda entre el pueblo y el mar, y su compromiso con la preservación de este vínculo es fundamental para el futuro sostenible de la comunidad y el medio ambiente marino en la región.




José Bonifacio LLaudis “Bony” es patrón mayor de cabotaje y mecánico. Lleva 35 años en la empresa familiar “Las Golondrinas Clavel SL”, fundada por su suegro  Jaime Ayza “Clavel”, dedicada al turismo de cabotaje. Actualmente la empresa dispone de dos barcos, la golondrina Olympia  que hace tour alrededor del castillo de Peñíscola con una duración de 30 minutos, y el Catamarán Clavel que hace un tour de 10 horas a las islas Columbretes, visitando su parque natural.

Bony no llegó a ser pescador, al terminar su formación, pasó directamente de patrón a una de las embarcaciones turísticas de su suegro.

En la actualidad sus hijos y sobrinos forman las dotaciones de ambos barcos y todos con su titulación correspondiente. 
 

Rafael Simó, presidente de la Cofradía de Pescadores




Rafael Simó es patrón de pesca litoral de segunda clase y mecánico al mando del arrastrero L´Armos junto con su hermano Antonio. Lleva tres años ejerciendo de presidente de la cofradía.

¿Cuántos años lleva en el oficio?

A los 14 años comencé a trabajar en el mar, y desde que mi padre se jubiló hasta hoy, llevo ya treinta años de patrón.

¿Cuántos barcos integra  la cofradía? 

Actualmente somos 17 arrastreros y 10 de artes menores. Con el tiempo seremos menos, la media de los patrones es de 50 años, y no tenemos relevo generacional en nuestro sector. Todos los barcos son de familias, como hermanos o padre e hijos.

¿En qué sector de pesca faenáis?

La flota de arrastreros se dispersa  por un triángulo imaginario entre Peñíscola, Castellón y la isla Grossa de las Columbretes, entre las tres y las doce millas de la costa.  También con el permiso correspondiente podemos ir a pescar a otras provincias. En la actualidad los arrastreros salimos solamente cuatro días la semana, de lunes a jueves. Los barcos de pesca menor lo hacen desde la costa hasta las tres millas y pueden salir a pescar todos los días del año. Ellos normalmente salen el domingo a dejar las redes. Este año tenemos asignados 115 días y calculamos que como mucho nos puedan asignar 15 más en octubre.

Por mal tiempo nunca se ha cerrado el puerto. Si los patrones quieren pescar no se les prohíbe la salida, pero generalmente no salimos a pescar.

Antiguamente con mal tiempo se salía siempre, porque era cuando se realizaban más capturas, porque se mueve el mar y el pescado que es listo, ya que no ve la red. 

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