En los últimos siete años, los servicios de vigilancia terrestres y marítimos de las Islas Canarias han llevado a cabo 6.600 actuaciones de control de actividades ilegales de pesca en zonas de especial conservación.
Las labores de vigilancia y control desarrollados en las
Zonas Especiales de Conservación Marina (ZEC) del archipiélago canario desde 2018 han reportado más de 28.000 observaciones y 6.600 intervenciones de actividades de pesca ilegal, marisqueo en zonas prohibidas, avistamientos no autorizados de cetáceos, fondeos sobre sebadales y prácticas subacuáticas sin licencia.
Este servicio también ha reportado acampadas irregulares o vertidos de residuos y ha colaborado en tareas de asistencia a la fauna marina protegida.
Estas labores están cofinanciadas por el
Programa Canarias FEDER y fondos propios de la comunidad autónoma, lo que ha permitido garantizar la protección de hábitats frente a las presiones derivadas del turismo y las actividades humanas.
MEDIOS MARINOS
Los buques Mar Canario, con base en Tenerife e Isla Graciosa, con base en Gran Canaria, pertenecientes a la
Consejería de Transición Ecológica, han recorrido más de 18.000 millas náuticas en labores de seguimiento ambiental y control de actividades no permitidas.
Ambas embarcaciones, de 10,3 metros de eslora y 4,5 metros de manga, operan en las ocho islas y cuentan con un sistema que permite la recogida de plásticos y algas. Además, también están equipadas con 1.500 metros de barreras de control para poder actuar en caso de derrame de hidrocarburos.
Entre su dotación figura un vehículo submarino (ROV) operado remotamente con capacidad para grabar imágenes hasta 150 metros de profundidad.
La competencia sobre las zonas ZEC está compartida entre el
Ministerio para la Transición Ecológica y las Comunidades Autónomas.
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número 660 Revista MAR